El sur de Brasil ha sido testigo de una tragedia devastadora en las últimas 24 horas, a medida que un ciclón extratropical azotó los estados de Rio Grande do Sul y Santa Catarina, conocidos por ser destinos populares de veraneo para argentinos. Las consecuencias de este fenómeno meteorológico han dejado al menos 22 personas muertas y una serie de desastres naturales que han afectado profundamente a estas regiones fronterizas.
El ciclón extratropical, cuyo impacto tomó por sorpresa a muchas comunidades, desencadenó fuertes lluvias, inundaciones, deslizamientos de tierra y desbordes de los ríos en varias ciudades del interior de los estados afectados. Más de veinte municipios han declarado oficialmente el estado de emergencia en respuesta a la magnitud de la catástrofe.
En el estado de Rio Grande do Sul, la situación se ha tornado especialmente trágica. El gobernador Eduardo Leite ha confirmado que el número de víctimas mortales en esta región, limítrofe con las provincias argentinas de Corrientes y Misiones, ha ascendido a 21. La localidad de Muçum ha sufrido una pérdida devastadora, con el descubrimiento de 15 cuerpos de personas que perdieron la vida ahogadas por las corrientes de agua.
Uno de los ríos más afectados por el desbordamiento ha sido el Rio Taquarí, cuyas aguas han inundado extensas áreas. Incluso la capital de Rio Grande do Sul, Porto Alegre, no ha escapado a la furia de las inundaciones, enfrentando trastornos considerables.
En cuanto a las causas de muerte, siete personas en Rio Grande do Sul perdieron la vida debido a las inundaciones y a incidentes relacionados con electrocuciones, según informes de Radio Gaúcha. Esta no es la primera vez que la región se ve afectada por un ciclón extratropical en el presente año, ya que en mayo pasado, otro evento meteorológico similar se cobró la vida de 16 personas en Rio Grande do Sul.
El estado vecino de Santa Catarina también ha sufrido las consecuencias mortales del ciclón, con un trágico incidente en la ciudad de Jupiá, donde una persona perdió la vida aplastada por un árbol.
Ante la magnitud de la emergencia, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva ha anunciado la intervención del personal de Defensa Civil para brindar asistencia a las gobernaciones de los dos estados afectados. Estos estados desempeñan un papel crucial en el comercio terrestre del Mercosur, por lo que la situación también tiene implicaciones en el ámbito económico.
La tragedia en el sur de Brasil es un recordatorio doloroso de la vulnerabilidad de las comunidades ante los fenómenos meteorológicos extremos y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva de las autoridades y la sociedad en general en momentos de crisis. Nuestros pensamientos están con las víctimas y sus familias mientras estas regiones luchan por recuperarse de esta devastadora tragedia.