El Banco Central lanza nuevas medidas para reforzar reservas y controlar la emisión monetaria

El plan incluye créditos externos, bonos para empresas, fin del uso de tasas de referencia y una política de absorción de pesos. Buscan contener la inflación y bajar el riesgo país, que sigue alto.

En una apuesta por estabilizar la economía y fortalecer las reservas internacionales, el Ministerio de Economía y el Banco Central anunciaron este lunes una nueva estrategia financiera. El plan, que apunta a captar dólares y restringir la cantidad de pesos en circulación, contempla una batería de medidas entre las que se destacan préstamos del exterior, nuevas emisiones de bonos y una redefinición del marco monetario.

Entre las decisiones más relevantes está una nueva colocación en el marco de los acuerdos Repo, mediante los cuales el Banco Central tomará hasta USD 2.000 millones prestados de bancos internacionales. Esta será la segunda operación del año, tras una primera realizada por USD 1.000 millones. Aunque no se especificaron los nombres de las entidades ni las condiciones financieras, el objetivo es claro: sumar divisas a las reservas sin recurrir a compras directas en el mercado oficial.

Otra medida clave es la recompra de contratos de opciones “put” sobre bonos del Tesoro, en manos de entidades financieras, lo que permitirá al BCRA tener un mayor control sobre la masa monetaria. Además, el miércoles se lanzará una nueva serie del bono Bopreal, destinado a empresas que aún no pudieron girar utilidades o dividendos acumulados antes de 2025, o que mantienen deudas comerciales previas al 12 de diciembre de 2023. Según estimaciones privadas, entre USD 7.000 y USD 10.000 millones siguen atrapados por las restricciones cambiarias anteriores.

En cuanto al control monetario, el BCRA anunció el fin de las Letras Fiscales de Liquidez (LEFI) a partir del 10 de julio, y con ellas la eliminación de la tasa de política monetaria como referencia. En su lugar, la tasa de interés será determinada por el mercado. Este cambio se enmarca en un retorno a un esquema basado en el control de agregados monetarios.

También se modificará el régimen de encajes bancarios, aumentando gradualmente el efectivo mínimo requerido para partidas que generan alta volatilidad o dificultan el acceso al crédito.

Respecto al financiamiento del Tesoro, se mantendrá un cronograma de licitaciones quincenales. A partir de ahora, estas incluirán Letras del Tesoro Capitalizables (LECAPs) con vencimientos a 1, 2 y 3 meses, y bonos de mayor plazo en pesos, ajustados por diferentes mecanismos como tasa fija, CER, TAMAR, dólar linked y hard dollar. Como novedad, se permitirá la suscripción de estos títulos en dólares —por hasta USD 1.000 millones mensuales— por parte de inversores tanto locales como del exterior.

El Banco Central, además, podrá intervenir activamente en el mercado secundario de títulos públicos de corto plazo cuando lo considere necesario, con el fin de asegurar el buen funcionamiento del mercado financiero.

Con estas medidas, el Gobierno busca dar señales de disciplina monetaria y previsibilidad, claves para controlar la inflación y reducir el riesgo país, que permanece por encima de los 650 puntos. Sin embargo, analistas advierten que el éxito del plan dependerá de la confianza de los inversores y del contexto macroeconómico en los próximos meses.