Este domingo 19 de noviembre, el país se encuentra inmerso en una jornada crucial: el balotaje 2023. En vivo y con gran expectación, el 30% del padrón electoral ya ha ejercido su derecho al voto. En esta segunda vuelta, el diputado nacional Javier Milei, representante de La Libertad Avanza, y el actual ministro de Economía, Sergio Massa, postulado por Unión por la Patria, compiten en un duelo electoral que determinará quién ocupará la presidencia de la Nación.
Ambos candidatos, conscientes de la importancia de esta jornada, ya han depositado su voto. La participación en esta instancia es obligatoria para todos los ciudadanos habilitados en el padrón electoral, según lo establece la Ley de Ciudadanía Argentina (26.674). En total, 35.394.425 personas están llamadas a las urnas entre las 8 de la mañana y las 6 de la tarde, horario en que cerrarán los centros de votación.
¿Quién se alzará con la victoria según la ley?
El desenlace de este balotaje sigue las reglas del Código Electoral Nacional, que establece que resultará electa la fórmula que obtenga el mayor número de votos afirmativos válidamente emitidos. El veredicto se revelará una vez concluido el escrutinio y se conocerá la preferencia de la ciudadanía.
El voto en blanco en el balotaje: sin impacto en el resultado
A diferencia de otras instancias electorales, en el balotaje, el voto en blanco no influye en el resultado final. Solo se consideran los votos afirmativos por alguna boleta partidaria. La fórmula presidencial que acumule más votos individuales será la triunfadora, sin importar el porcentaje de votos en blanco, impugnados o nulos.
¿Por qué hay balotaje en 2023?
El balotaje se activa cuando ningún candidato alcanza el mínimo necesario para ganar en la primera vuelta. En Argentina, esto ocurre si no se logra el 45% de los votos afirmativos válidamente emitidos o si ningún candidato obtiene el 40% de los votos válidos con al menos 10 puntos de diferencia del segundo.
La obligatoriedad del voto y las consecuencias de no participar
En Argentina, el voto es obligatorio, y la Ley de Ciudadanía Argentina establece que todo elector tiene el deber de votar en la elección nacional que se realice en su distrito. Aquellos que no participen enfrentarán multas y restricciones. La multa oscilará entre $50 y $500, dependiendo de la cantidad de infracciones previas sin regularizar.