La parrilla y la caja china son dos métodos de cocción muy populares entre los amantes de los asados. Ambos funcionan con brasas, pero tienen diferencias importantes que pueden influir en el resultado final de los alimentos. En este artículo te explicaremos qué es una parrilla y una caja china, cuáles son sus ventajas y desventajas, y qué tipo de platos puedes preparar con cada una.
¿Qué es una parrilla?
Una parrilla es una rejilla de hierro, fierro o acero inoxidable que se coloca sobre el fuego y sobre la que se ponen los alimentos a asar. La parrilla puede ser fija o portátil, y puede funcionar con leña, gas o electricidad. La parrilla permite cocinar los alimentos directamente sobre las brasas, lo que les da un sabor ahumado y un exterior dorado y crujiente. Sin embargo, también implica un mayor riesgo de que se quemen o se sequen si no se controla bien el tiempo y la temperatura.
La parrilla es ideal para cocinar carnes, pollo, cerdo, anticuchos, hamburguesas, vegetales y otros alimentos que no requieren mucho tiempo de cocción. Además, la parrilla ofrece la posibilidad de variar los sabores y aromas de los alimentos usando diferentes tipos de leña o añadiendo hierbas o especias al fuego.
¿Qué es una caja china?
Una caja china es un horno que funciona con brasas. Está hecha de acero inoxidable o madera, y tiene dos niveles en su interior. En el nivel inferior se colocan los alimentos a cocinar, y en el nivel superior se ponen las brasas. La caja china tiene una tapa que cierra herméticamente el horno y evita que el calor se escape. De esta forma, los alimentos se cocinan a una temperatura constante de entre 90 y 110 grados centígrados, sin entrar en contacto directo con el fuego.
La caja china tiene la ventaja de cocinar los alimentos a fuego lento, lo que los hace más tiernos y jugosos por dentro, y al mismo tiempo les da un tostado y un gratinado por fuera. Además, la caja china permite cocinar piezas grandes de carne o pescado, como lechón, cordero o salmón entero, sin necesidad de darles vuelta ni vigilarlos constantemente. La caja china también tiene una doble función, ya que se puede usar la parte superior como una parrilla adicional.
¿Qué platos puedes preparar con una parrilla o una caja china?
Con una parrilla puedes preparar todo tipo de platos que se cocinen rápido y que tengan un sabor ahumado característico. Algunos ejemplos son:
- Brochetas de carne y verduras
- Choripanes
- Costillas de cerdo
- Lomo saltado
- Pescado a la brasa
- Pinchos morunos
- Sardinas asadas
Con una caja china puedes preparar todo tipo de platos que se cocinen lento y que queden tiernos y jugosos por dentro y crujientes por fuera. Algunos ejemplos son:
- Cochinillo asado
- Cordero al horno
- Lechón a la caja china
- Pavo relleno
- Patatas asadas
- Pollo al limón
- Verduras al horno
Conclusión
La parrilla y la caja china son dos formas distintas de cocinar con brasas que ofrecen resultados diferentes según el tipo de alimento y el tiempo de cocción. Ambas tienen sus ventajas y desventajas, por lo que la elección dependerá del gusto personal de cada uno. Lo importante es disfrutar del sabor y la compañía de un buen asado.