A solo tres días de la asunción presidencial, Javier Milei y sus equipos han mantenido un hermetismo total en torno a las decisiones clave que marcarán el inicio de su gobierno. Desde el lunes, las oficinas de LLA en Retiro se han convertido en el epicentro de reuniones, con la participación puntual del presidente electo. En este contexto de estricto secreto, se delinean los últimos detalles del Gabinete, el programa para Hacienda y una ley omnibus que planean enviar al Congreso durante sesiones extraordinarias.
La preocupación por posibles filtraciones ha llevado al presidente electo a ordenar la máxima confidencialidad en torno a los pormenores de estas decisiones cruciales. Aunque a tres días de la toma de posesión aún no se ha revelado oficialmente el programa que buscará “cambiar a la Argentina para siempre”, los funcionarios se mantienen en silencio, asegurando que los detalles finos solo se conocerán después de la asunción el 11 de diciembre.
Ayer, Milei se sumergió en el Hotel Libertador, con una breve interrupción en el edificio Chacofi II de Retiro, el improvisado “búnker de gobierno”. El presidente electo, escoltado por un reducido número de custodios, evitó las cámaras y los micrófonos mientras se dirigía a las oficinas donde convergen los futuros ministros y sus equipos.
La actividad política se concentró en la torre de Av. del Libertador y Cerrito, donde se reunieron importantes referentes libertarios, tanto políticos como económicos. Entre ellos, Nicolás Posse, Guillermo Francos, Lisandro Catalán, Patricia Bullrich y Santiago Caputo. Manuel Adorni, portavoz del equipo, fue uno de los pocos que habló con la prensa, destacando que las comunicaciones oficiales se realizarán a través de la Oficina del Presidente Electo.
La jornada también definió algunos nombramientos clave, como la continuidad de Carlos Alberto Soratti al frente del Incucai y la designación de Belén Stettler como Secretaria de Comunicación. Además, se confirmaron roles importantes en el Banco Nación y el INDEC.
Enfocándose en el aspecto económico, los futuros responsables, como Luis “Toto” Caputo, Santiago Bausili y Pablo Quirno, se reunieron para dar forma al plan económico y a la ley omnibus. Entre las posibles medidas se incluirían un nuevo mecanismo de blanqueo de capitales, recortes en el Estado, una reforma laboral inspirada en la UOCRA, la eliminación de la SIRA y acciones orientadas a eliminar los controles de precios.
Las reuniones recientes se han centrado en el Gabinete y el programa económico, mientras Milei, en un discurso aún envuelto en misterio, se espera que se dirija no a la Asamblea Legislativa, sino a sus seguidores desde las escalinatas del Congreso. Aunque los futuros funcionarios se han mostrado reacios a proporcionar detalles, la fórmula repetida es que “se están llevando a cabo buenas reuniones con los equipos técnicos”. El 11 de diciembre, finalmente, se revelarán los detalles de este ambicioso proyecto que Milei espera marque un cambio trascendental para la Argentina.